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Esta atracción es tan impactante para el que se desliza por ella como para el que le espera abajo, que le verá llegar en un santiamén, casi sin darse cuenta de que ha llegado ya a la piscina. Sí, la rapidez es otra de las características del Kamikaze, un tobogán que tiene su salida a una gran altura, lo que le hace visible desde prácticamente todas las partes del parque.
Alucinante, electrizante, excitante e impresionante son algunos de los adjetivos que describen a la perfección a Kamikaze, uno de los reyes de los parques acuáticos. En este tobogán se pueden alcanzar velocidades de hasta 50 kilómetros por hora.
Tendrás que ser muy valiente para disfrutar de la adrenalina que te causará la velocidad que se alcanza, casi sin darte cuenta, gracias a los repentinos cambios de pendiente de esta atracción. Si quieres llegar al máximo, junta piernas y brazos a tu cuerpo para ser más aerodinámico y batir todos los récords.
Los mayores y los niños que superen los 1,40 metros podrán subir todas las veces que quieran. La alta velocidad que se adquiere cuando desciendes hará que te sientas como una bala humana disparada hacia la piscina y que el tiempo se te pase volando.